Cómo hacer biocarbón o biochar

 

El Descubrimiento

Cerca de 1.870 grandes extensiones de tierras en "Terra Preta de Indio" o tierras indígenas de suelos negros fueron descubiertas en la cuenca amazónica. Estos suelos son extremadamente estables y fértiles cubiertos por una capa de dos metros de profundidad de altos contenidos de materia orgánica, algo que nadie había oído de los trópicos. Estos han sido creados por miles de años en que los agricultores indígenas han ido mezclando las cenizas sobrantes de sus fogatas con el desecho orgánico en la tierra.

El descubrimiento de estos suelos amazónicos ha despertado interés en el biocarbón, llamado también biochar, que es el carbón vegetal que ha sido inoculado con microorganismos benéficos.

Los Propiedades

El biocarbón tiene dos propiedades intrigantes:

La primera es su resistencia a la degradación en la tierra por un mil de años o más... y la segunda es que posee un área de superficie extremadamente alta y 35 gramos de biocarbón pueden tener más de una hectárea de superficie. Esto suministra un excelente hábitat para las bacterias y los hongos beneficiosos. Esta gran área de superficie tiene la facultad de contener nutrientes esenciales de un modo que los hace disponibles tanto a plantas como a la diversa vida de los suelos.

La primera de estas propiedades ofrece beneficios a largo plazo. Los climas cambian rápidamente debido a la alta emisión de carbono en el aire y es una gran amenaza para todos nosotros. Pero la amenaza es más inmediata a los agricultores con bajos ingresos en los trópicos, como los millones de campesinos en Centroamérica que tratan de sobrevivir en el corredor seco, el cual empeora rápidamente.

Las plantas usan la fotosíntesis para capturar el carbono del aire, pero el retorno al aire es tan rápido que no proporciona una solución a largo plazo. La capacidad del biocarbón de retener el carbono en los suelos por miles de años le da un valor potencial en la lucha para la estabilización de nuestros climas.

La segunda propiedad del biocarbón lo hace un producto de uso inmediato para el cultivo de plantas. El valor del biocarbón es mucho mayor cuando el carbón se rompe en pequeños pedazos, se prepara con nutrientes para plantas y después se mezcla con compost para inocular con una gran variedad de bacterias y hongos beneficiosos del suelo. Su beneficio es mayor donde más se necesita que es en suelos delgados o en suelos tropicales arenosos con baja fertilidad y poca materia orgánica. El añadir biocarbón al suelo puede mejorar la eficiencia del uso del agua, así como del uso de los nutrientes y a la vez reducir la erosión, el escurrimiento y la contaminación del agua.

El biochar puede comprarse en algunos almacenes de provisiones para agricultores o en la internet en US, Europa y Japón. Pero aun cuando está disponible, es muy costoso para que las familias con bajos ingresos puedan usarlos en los jardines de sus casas. Una opción más realista es que ellos mismos lo fabriquen.

Fabricar biocarbon

Hay muchas formas de fabricar biochar en casa. A continuación, les presentamos dos métodos muy simples y dos un poco más complicados: Algunos de estos usan un horno o estufa de tiro invertido para fabricar el biochar.

El método más simple es apilar ramas secas, madera o bambú de aproximadamente un metro de largo y encender fuego en la parte superior. Usted probablemente necesitará papel periódico o chamizos para que el fuego se encienda en la parte de arriba. Añada madera cuando se vaya consumiendo, en la medida en que el fuego cambie de llamas a brasas, échele suficiente agua encima para asegurarse de que se apague completamente.

La segunda técnica simple para hacer biocarbón es similar, pero el fuego se contiene mayormente en un hoyo. Este puede ser un cono de un metro de alto por un metro de ancho. Nosotros usamos un agujero de más o menos 120 cm de largo por 60 cm de ancho y 60 cm de profundidad. Esto permite quemar madera más grande, el agujero contiene el fuego mucho mejor que la fogata abierta y permite apagar el fuego con agua o con tierra encima de las brasas.

El tercer método es usar un barril metálico de 55 galones para contener la madera y con una cámara de combustión secundaria que se pone encima del barril para quemar los gases que se escapan. Este método quema de un modo más limpio y produce menos polución. La cámara de combustión puesta encima se puede usar como estufa y hacer uso del calor que produce. Usted puede buscar en internet ejemplos de como modificar barriles metálicos para fabricar biochar.

El cuarto método es más complejo que el del agujero, pero tiene una ventaja muy grande que es la posibilidad de cocinar alimentos con el calor producido cuando se está fabricando biocarbon. Ya que 1⁄3 de la población mundial cocina con fuegos abiertos, una estufa de alta eficiencia que también produce biochar para el jardín es de gran potencial. Hay docenas de variaciones de estas estufas. Esta llamada Estufa Finca es de una ONG en Costa Rica.

Está diseñada de manera muy ingeniosa a partir de un barril metálico de 5 galones y una hoja metálica. El barril se llena con madera seca, en este caso bambú seco, se prende en la parte superior y un segundo barril metálico que sostiene la olla. Cuando la comida termina de cocinarse y las llamas se han extinguido, entonces se vacían los carbones en el barril metálico. Entonces este se tapa para bloquear el oxígeno o se apaga con agua.

De cualquier modo, que usted decida hacer su carbón, los siguientes pasos son casi los mismos.

Utilizar biocarbon

Cuando el carbón esté completamente frío, la rastrillamos y entonces recogemos los pedazos grandes que no se carbonizaron completamente. Estos pueden reservarse para la próxima fabricación de biocarbón.

Entonces cernimos el resto del carbón vegetal en una malla o angeo de 13 mm o ½ pulgada y lo resultante lo volvemos a cernir a través de una malla de 6 mm o ¼ de pulgada.

Ahora con una barra o martillo destrozamos lo que no pasó por la malla y lo cernimos de nuevo. Comúnmente usamos la punta plana de una barra de punta de acero de 120 cm o 4 pies de largo, como un arpón. Requiere de esfuerzo, pero si aún está húmedo produce menos polvo cuando se destroza y se tamiza. Siempre queda algo de carbón que no pasa por la malla tan fácilmente, ese sobrante lo echamos al compost.

El carbón tamizado por la malla de 6 mm o ¼ de pulgada es ideal para usar en el jardín de vegetales. Antes de incorporarlo lo mejoramos con nutrientes para plantas al menos 2 o 3 días antes de usarlo. Usted puede usar emulsión de pescado, estiércol o cualquier fertilizante orgánico. La orina funciona muy bien como coadyuvante de nutrientes de plantas para el carbón y el biocarbón absorbe el olor de la orina. Algunas personas encuentran esto un poco molesto pero la utilización de la orina como fertilizante se está aceptando cada vez más y la combinación de esta con el biocarbón tiene muchas ventajas ambientales.

Después de que el carbón absorba los nutrientes de las plantas lo mezclamos con al menos dos partes de compost por cada parte tratada de carbón. Lo dejamos descansar por al menos 10 días para que las bacterias y hongos beneficiosos encuentren acomodo en los miles de microporos del carbón.

Si usted puede incorporar de 2-3 cm de la mezcla de char-compost encima de unos 15 cm del suelo de su jardín, su tierra y sus plantas se pondrán muy felices. El biocarbón tiende a ser alcalino pero el compost por lo general neutralizará eso, a menos que usted esté usando demasiado carbón y el pH sea ya muy alto. Si usted solo cuenta con una pequeña cantidad de biocarbón, añada un balde de carbón a 3 o 4 baldes de tierra para macetas y así ayudar a sus semillas a tener un excelente comienzo.

Debido a que el biocarbón es estable en el suelo por miles de años, usted puede añadir una pequeña cantidad cada año, gradualmente acumulando un óptimo beneficio para una tierra sana, sus plantas y su suelo serán felices por mucho tiempo.

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